POBREZA Y CARENCIA vs RIQUEZA Y PROSPERIDAD

Acumular riquezas por codicia bloquea su circulación: 
Jesús dijo que es muy difícil para el hombre rico entrar en el Reino del Cielo. Esto no es debido a su riqueza, ni a su dinero, sino al concepto y uso que tiene del mismo.
El hombre cree que las posesiones son suyas, de su propiedad individual; sin embargo, las riquezas y en especial el dinero deben "fluir", mantenerse en circulación para uso de todos, y no acumularse con fines egoístas.
Tanto en ricos como en pobres prevalecen estas creencias de posesión y derecho individual.
Ser próspero es un derecho de nacimiento. Los recursos universales son suficientes para todos y abundantes.
Una persona con conciencia rica, es una persona generosa, vive rodeada de abundancia, tiene ideas útiles y constructivas, obtiene lo que necesita fácilmente, vive confortablemente, no tiene apegos materiales ni teme al futuro. Es creativa.

Ser pobre no es una virtud: 
La pobreza limita la expresión de nuestros talentos y capacidades. Todos merecemos bienestar, una vida buena y próspera.
Pensemos que somos representantes de Dios en la tierra; honremos la vida y honremos a Dios; seamos personas íntegras; hagamos lo correcto, seamos confiables. No hay diferencia si somos ricos o pobres. En el fondo del corazón sabemos qué está bien y qué está mal. 
El propósito de la vida es crecer y evolucionar. 

¿Cuáles son los beneficios de la prosperidad?:
Libertad financiera, buena calidad de vida, elección de vida, posibilidad de ayudar a otros, realizar viajes, conocer otras culturas, lugares y gente, concretar proyectos, ideas e iniciativas, comfort.
Asi como aprendemos a ser pobres y pesimistas podemos aprender a ser ricos y emprendedores.
Busquemos lo bueno y cuando lo encontremos, comencemos a buscar lo muy bueno, y luego, lo excelente. Aprendamos a ir eligiendo lo mejor, paso a paso.

"Todo está permitido pero no todo es conveniente. Todo está permitido pero no todo ayuda al crecimiento espiritual.
"I Corintios 10 (23)"